Empezamos precalentando el horno a 180ºC y cubriendo la base y los laterales de un molde con mantequilla y harina.
A continuación, cogemos una naranja grande y procedemos a limpiarla y trocearla(sin retirar la piel) para, posteriormente, triturarla en una picadora. Una vez triturada, reservamos la pulpa de la naranja.
Cogemos un bol grande y, con ayuda de una batidora, batimos los 3 huevos. A continuación, introducimos el azúcar, el aceite de girasol y el yogurt natural. Mezclamos estos nuevos ingredientes de manera suave hasta que se integren completamente.
Ahora es el momento de introducir los ingredientes secos restantes. Incorporamos la harina tamizada, el sobre de levadura química en polvo y un pellizco de sal. Mezclamos de nuevo para integrar todos estos ingredientes.
Únicamente queda añadir el ingrediente estrella de esta elaboración: la naranja. Una vez introducida la pulpa de la naranja, volvemos a remover todo de manera suave con movimientos circulares.
Para acabar, volcamos la masa en el molde y lo horneamos durante 40-45 minutos. Importante: no debemos abrir nunca el horno hasta que pasen 2/3 partes del tiempo de horneado, sino, el bizcocho se hundirá por la pérdida de calor.
Una vez horneado, dejamos reposar el bizcocho durante unos minutos antes de sacarlo del molde.
Y, para los amantes de una buena decoración, recomendamos espolvorear con un poco de azúcar glas por encima. ¡Que aproveche!